David Moya, cantautor murciano, actuará el próximo 2 de marzo en el Museo del Vino de Bullas. La actividad se celebra dentro del contexto de Vinarte, una programación que une vino y cultura. El cantante murciano, tras finalizar su gira “Homenaje Tour 2023” en la que conmemora sus 25 años delante del micrófono, ofrece un concierto en la ciudad en el que hará repaso de su carrera.
Ha finalizado tu gira “Homenaje Tour 2023” con la que has conmemorado tus 25 años en la música ¿cómo ha ido?
Ha sido agradable porque he recuperado canciones que hacía tiempo que no tocaba y hemos tocado en sitios en los que hacía tiempo que no actuábamos. Mis sensaciones han sido positivas.
¿Qué es para ti subirte a un escenario incluso tras 25 años de carrera?
Es algo que necesito hacer con una cierta regularidad. Necesito tener ese momento de intimidad y encuentro, tanto conmigo mismo como con la gente que viene a verme.
¿Ha cambiado tu relación con los escenarios y el público en este tiempo?
Sí, ahora es una relación más madura. Me hace valorar más las sensaciones propias. En otro momento de mi vida he valorado más otras cosas, sobre todo cuando era mi trabajo. Valoraba mucho si tenía repercusión un concierto. Ahora mismo eso son cosas secundarias.
¿Cómo mantienes la ilusión de seguir contando historias?
Porque siento que voy escribiendo un diario y cada disco es un capítulo nuevo. Me hace ilusión ir dejando por escrito las cosas que me van pasando. Tengo dos hijas y es una manera de que me conozcan.
¿Qué dirías que te aporta plasmar tus emociones y pensamientos en las canciones?
Es un hecho liberador. Desde que empecé a tocar la guitarra tuve claro que quería usar eso como un medio para poder expresar lo que siento. Y así sigue siendo después de tantos años.
Te defines como “eterno aprendiz” ¿ese es el truco para mantener la ilusión, considerar que siempre hay algo nuevo que aprender?
Es que siempre hay algo nuevo que aprender. El que piense lo contrario se está perdiendo muchas cosas, en cada etapa de la vida somos una persona diferente. Saber dónde estás en cada momento me parece interesante. Me daría tristeza o aburrimiento pensar que no tengo nada nuevo que aprender.
¿Cómo recuerdas la Asociación Murcia Canción de Autor y la época de Ítaca?
Con mucho cariño porque aquella fue una época de mucho contacto con otros artistas. Nos llevó a todos a crecer, aprender los unos de los otros.
¿Crees que hoy en día es esencial para un cantautor estar dentro de la industria musical?
Depende cuáles sean tus objetivos. Si tu objetivo es que sea un trabajo solvente sí es necesario. Hoy lo que les interesa es gente que arranque por sí misma y cuando ya están en un determinado lugar ficharlos. Tienes que tener visitas en tus vídeos y seguidores en redes sociales para que se fijen en ti.
No sólo por su disco “El tiempo lento de las cosas”, sino que suele reivindicar el bajar el ritmo y pararse ¿por qué lo ve necesario?
Porque realmente no estamos viviendo, nos metemos en un engranaje y eso nos desconecta absolutamente de lo que somos. Tú crees que las cosas no pueden ser de otra forma y vas todo el día montado en ese avión a toda velocidad. Así es difícil saber quién eres o qué sientes.
¿Habrá pronto música nueva?
Sí, tengo ya canciones para un disco nuevo. De hecho estoy empezando a grabar. Este trabajo me lo voy a producir yo y estoy trabajando en casa. Veremos hasta dónde llego y en qué punto del proceso empiezo a tirar de otras personas.
¿Cómo es tu proceso para conformar un álbum?
Realmente es una recopilación de canciones, pero es cierto que son canciones que se han compuesto durante años, hay una o varias temáticas en el disco. Depende de lo que haya vivido en ese momento. Siempre acaba teniendo un sentido, aunque no se lo busque intencionadamente.
Tiene 7 discos separados por años en el tiempo ¿Cómo de importante es no tener presión en el proceso creativo?
Para mí es fundamental. Lo otro te lleva a hacer ejercicios creativos y artísticos, pero no a tomarte el gusto de lo que puedes llegar a expresar.
Su concierto en Bullas del 3 de marzo une música y vino. ¿Qué relación tienen para ti?
El vino siempre lo asocio a momentos de tranquilidad, disfrute y celebración. La música es una celebración de que estamos vivos, sentimos cosas, nos une y nos conecta. No hay una cultura que pueda vivir sin ella. Ese punto de magia creo que es motivo suficiente de celebración y el vino ahí entra bien y acompaña.
