ANTONIO JOSÉ ESPÍN/Diputado socialista en la Asamblea Regional
López Miras y sus socios tránsfugas han querido tramitar los presupuestos de la Región de Murcia para 2023 de forma exprés, por lo que en poco más de dos semanas desde su entrada en la Asamblea ya están en su fase final, sin dar apenas opciones a los grupos de la oposición, como legítimos representantes de la ciudadanía, de llegar a acuerdos y consensos que beneficien al millón y medio de ciudadanos y ciudadanas de la Región de Murcia.
Y, para variar, con estos presupuestos, el Partido Popular de la Región y sus aliados de extrema derecha vuelven a maltratar a las comarcas del Noroeste y el Río Mula.
Para López Miras seguimos siendo ciudadanos y ciudadanas de segunda. Tributamos de forma rigurosa, pero esa tributación no revierte en nosotros de forma justa. Y esto, evidentemente, cercena toda posibilidad de progreso económico de nuestras comarcas, ávidas de una apuesta por revitalizar nuestro tejido empresarial y turístico, y con un acuciante problema de despoblación, causado por la nefasta política de vertebración territorial del Gobierno regional.
En términos generales, estos presupuestos acrecentarán la monstruosa deuda pública de la Región, que sobrepasa ya los 11.500 millones de euros. De hecho, amortizarla nos costará a la ciudadanía en 2023 más de cinco millones de euros al día, un presupuesto mayor que el destinado a Educación.
Estas cuentas, además, no abordan los principales desafíos que tiene la Región de Murcia, entre los que destacan la desigualdad, la precariedad laboral o los recortes en educación o sanidad. Y son el mayor ejemplo de injusticia social, pues perdonan impuestos a los que más tienen y no asumen las demandas sociales de la enorme mayoría de habitantes de la Región, que sí se recogen con detalle en la propuesta que hizo el secretario general del PSOE, Pepe Vélez, a López Miras y sobre la que nunca obtuvimos respuesta.
Esta propuesta de acuerdo para apoyar los presupuestos recoge una serie de medidas necesarias y centradas, entre otras cosas, en reforzar la sanidad y educación públicas, en apoyar a las familias trabajadoras, en ayudar a las PYMES y al sector primario, así como en afrontar los principales desafíos en materia de infraestructuras, movilidad y Mar Menor. Medidas acordadas con la ciudadanía y a las que nadie debería oponerse.
Y es que es absolutamente prioritario resolver la situación de la sanidad en la Región. Los y las socialistas proponíamos la contratación de 670 nuevos profesionales para reducir las listas de espera y cubrir las necesidades de nuestro sistema público de salud.
También la inversión de 192 millones de euros para mejorar nuestro sistema educativo y, de esta manera, mejorar las infraestructuras escolares, reducir la ratio de alumnos en las aulas, aumentar las becas de comedor o garantizar la gratuidad de libros de texto.
De la misma forma proponíamos ampliar el presupuesto para dependencia, de forma que nadie tuviera que esperar para cobrar esta prestación básica o el aumento de 20 millones de euros para combatir la pobreza, que ha alcanzado en esta Región tasas insoportables. También ampliar 30 millones la partida para financiar la gratuidad del transporte público, tal como han hecho otras comunidades autónomas o la ampliación del presupuesto para vivienda e infraestructuras, que vuelve a ser irrisorio y no contempla, entre otras cuestiones, ni un solo euro para la construcción de la autovía del Norte, tan necesaria para la conectividad de nuestras comarcas.
Pero ni esto ni prácticamente nada de lo que le propusimos está incluido en estos presupuestos, que van a perpetuar la desastrosa situación de esta Región, y que tiene el terrible honor de estar a la cola en todos los índices de calidad de vida.
Y esto es más grave aún si tenemos en cuenta que el Gobierno de España va a enviar a Murcia en 2023 casi 1.000 millones de euros más que en el presente año. Una cantidad histórica que se suma a la inversión sin precedentes que lleva haciendo el Gobierno de Pedro Sánchez en nuestra Región desde el año 2018.
Sin embargo, y pese a esta inyección millonaria extra, para variar, las inversiones que proyectan los presupuestos de la Región para nuestros municipios son prácticamente nulas y nuestros proyectos más relevantes van a seguir sin financiarse. López Miras sigue imputándonos el peaje en sombra de la autovía del Noroeste, como si el resto de murcianos y murcianas no circulara por carreteras y autovías, cercenando la posibilidad de que ese dinero que proyectan como una inversión fantasma pueda utilizarse para que nuestros pueblos sigan creciendo social y económicamente.
Esto es tremendamente injusto y condena a nuestros municipios a autofinanciarse sin fondos, coartando nuestro avance y nuestras oportunidades de futuro.
No obstante, desde el PSOE presentaremos, como cada año, enmiendas al presupuesto, con las que intentaremos que López Miras y sus socios introduzcan en estas manidas cuentas las inversiones municipales que, por justicia, merecemos.
La esperanza de que lo hagan es prácticamente inexistente, pues la experiencia nos dice lo contrario. Pero nuestro compromiso con nuestra tierra es firme y contundente. Y, además, lo representa en primera persona Pepe Vélez que, como calasparreño, conoce al dedillo nuestras necesidades y ha sufrido en primera persona el trato indigno que llevamos sintiendo por parte del PP en esta tierra desde hace casi tres décadas. En él tenemos, sin duda, a nuestro mejor aliado.
Y es que, una cosa tenemos muy clara, si López Miras vuelve a rechazar nuestras enmiendas, será Pepe Vélez el que cumpla y solucione los problemas reales de la ciudadanía, a partir de mayo del próximo año, como presidente de nuestra Comunidad Autónoma.
