IU-VERDES
Desde el Grupo Municipal de Izquierda Unida esperábamos que el alcalde y los concejales imputados del equipo de gobierno caravaqueño asumieran su responsabilidad política y dimitieran. He de reconocer que fue grande nuestra ingenuidad. Ni hay dimisiones ni se las espera. Pero reflexionando con serenidad no es de extrañar que se aferren a su cargo, no es la primera vez que lo hacen y no es el caso “Roblecillo” el único escándalo de nuestro ayuntamiento en los últimos años,
Como ya enumeramos en el pleno de 3 de noviembre, han sido demasiados casos anómalos y de presunta corrupción en la política municipal con Domingo Aranda a la cabeza. Caber recordar el asunto de la UTE que nos costó mas de 9 millones de euros, Caravaca Jubilar donde se han despilfarrado otros 6 millones de euros, el auditorio como obra faraónica que posiblemente nunca se acabe supone otro dispendio de 6 millones de euros, los terrenos de la RENFE que se perdieron para siempre, la Glorieta mas de un millón de euros, los coches desaparecidos del depósito municipal, privatización de servicios públicos como la limpieza y la recogida de basuras, para favorecer intereses de empresa privadas, la calle de nueva apertura en Pinilla que es otro caso de presunta prevaricación, etc.,
Pero centrándonos en el asunto del Roblecillo (uno de los asuntos en el que la justicia a tomado cartas hasta el momento) es vergonzante que, después de lo que dice el Auto del Juez donde se manifiestan más que indicios de prevaricación y tráfico de influencias, tengan tan poca dignidad y no asuman un ápice de responsabilidad política, mas bien al contrario, siguen defendiendo su labor con altanería y con tintes chulescos: No hace falta más ver el tono y las declaraciones del portavoz municipal del Partido Popular.
En contra de lo que ha publicado algún medio de comunicación, el Grupo Municipal de Izquierda Unida va ha seguir trabajando y acudiendo a los órganos donde tenemos representación, vamos a estar en los plenos pidiendo la dimisión de todos los imputados, vamos a seguir destapando toda la presunta corrupción dentro de nuestras posibilidades. A partir de ahora, si cabe, con más empeño debido a esta situación insostenible, donde casi el ochenta por ciento del equipo de gobierno está imputado.
Nos habló el alcalde de normalidad y confianza. Si algo no hay hoy por hoy en nuestro ayuntamiento es normalidad y confianza. Ya ni sus votantes confían en ellos y ni nade, en su sano juicio, puede denominar esta situación como normal.
Haciendo autocrítica es verdad que nos precipitamos al abandonar el pleno antes de terminar el punto del orden del día que se puso el primero por la manifiesta urgencia. Debimos terminar el debate y abandonar el pleno al final del punto en cuestión, pero quizás el clamor popular y el ambiente tenso que se palpaba nos arrastraron a una decisión equivocada.
Nos vamos a sumar a la iniciativa de recogida de firmas para pedir la dimisión de todos los imputados y vamos a seguir trabajando por regenerar la política de nuestro municipio. Sabemos que hay quien piensa que con personajes como estos gobernantes municipales no se puede debatir, ni sentarse con ellos, pero tenemos la responsabilidad de ejercer nuestro mandato popular de oposición. Los asientos de Izquierda Unida en el salón de plenos del Ayuntamiento de Caravaca están repletos de dignidad y honradez, vamos a ser el contrapeso a los asientos de los imputados,