Mensajero es garantía de calidad, una calidad que va ligada a esta empresa desde sus inicios y que actualmente centra sus objetivos en la innovación, modernización y, ante todo, la sostenibilidad y respecto por el medio ambiente.
Fundada en los años 60 del siglo pasado, Mensajero ha sabido sobrevivir a todas las crisis que ha sufrido la empresa conservera a lo largo de las décadas y ha demostrado que es posible seguir creciendo, ofreciendo nuevas alternativas en torno al sector de la conserva y, todo ello garantizando la más alta calidad, sabor y propiedades en los productos de comercializa.
Filosofía innovadora
Mensajero es una fábrica de conservas vegetales afincada en el término municipal de Bullas. Con unas amplias y modernas instalaciones sigue adecuándose a las necesidades del sector y reduciendo el impacto sobre el medio ambiente de este tipo de industrias.
La empresa tiene su razón de ser y de subsistir gracias a la tecnología, a la inversión tecnológica y a la adaptación de los sistemas digitales. En los últimos años ha pasado del proceso puramente artesanal a mecanizar gran parte del proceso, explica Joaquín Pérez, director general de Mensajero, ya que la digitalización, mecanización e incluso el uso de la robótica agiliza los procesos en la manufactura y tiene como resultado una mayor calidad y conservación de las propiedades del producto. “Se trata, -explica Pérez- de hacer lo que siempre hemos hecho, pero de una manera organizada y netamente mecanizada”.
Desde los envases saliendo de un punto concreto hasta que vuelven al almacén, no hay manipulación alguna, todo es un circuito donde se transporta, se llena, se añaden los ingredientes necesarios y se termina con el tratamiento térmico. Una automatización que garantiza la calidad ya que “desde que los productos entran a la línea de producción hasta que salen envasados al almacén, han transcurrido en el más largo de los casos unos 20 minutos más el tratamiento técnico correspondiente”, explica.
Ingredientes de calidad más tecnología logran el objetivo de que el producto llegue al mercado en unas condiciones bastante cercanas a como se encuentran en su medio natural. Generando, además, una mayor optimización de la producción.
La digitalización permite que desde cualquier punto y en cualquier momento se pueda conocer en tiempo real lo que está sucediendo en cada punto del proceso, “porque todo está conectado y nos aporta unos sistemas de comunicación que nos dan una visión, un control y una información continuada sobre todo el proceso”.
Innovación
Mensajero ha desarrollado, junto con una empresa dedicada al sector de los envases en la Región de Murcia, un nuevo sistema de envasado al vacío, OpenVac.
Habitualmente, cuando se trata de alimentos envasados, éstos se presentan en almíbar o en agua. En el primero de los casos aporta al producto unos niveles de azúcar que en origen no tenía y, en el segundo, al envasarlos en agua éstos pierden azúcares que sí contenían. La diferenciación de cada uno de los procesos permite adecuar en el envasado a las necesidades de cada producto.
El nuevo sistema de envasado al vacío, actualmente aplicado a la producción de alcachofa, es un sistema donde el producto no lleva líquidos de cobertura, ni agua ni almíbar, ya que en el envase se genera un vacío que garantiza que el producto mantenga todas sus propiedades y sabor, incluso durante más tiempo.
El envase es más práctico dado a su fácil apertura, más limpio porque no hay que desechar líquidos y mucho más saludable ya que el producto se mantiene igual que al inicio del proceso de manufactura.
Sostenibilidad
La industria conservera precisa de diversos recursos energéticos para desarrollar todo el proceso de manufactura.
En la adhesión y puesta en marcha de sistemas más eficientes y sostenibles energéticamente, al tiempo que más respetuosos con el medio ambiente, radica gran parte del trabajo de esta empresa.
El vapor se utiliza para los tratamientos térmicos de los productos. Para generar este vapor normalmente se utiliza gas natural, un elemento con bajo contenido en carbono y respetuoso con el medio ambiente y, aunque durante el proceso de producción se generan residuos -principalmente en el pelado y deshuesado de la fruta y hortalizas-, Mensajero trata estos residuos de tal forma que puedan tener una segunda vida, ya sea para alimentación animal, compostaje o como combustible para el uso de biomasa.
En esta empresa conservera cuentan con un sistema independiente de gestión de estos subproductos que terminan en los silos y es reciclado para otros usos. Del mismo modo, los vertidos líquidos que se generan se filtran y tratan antes de ser depurados. Mensajero forma parte de un grupo de trabajo que está investigando cómo tratar el lodo residual de la depuración del agua para aplicarlo en la agricultura y hay, además, otro grupo operativo donde estudian la posibilidad de utilizar plásticos biodegradables en los envases.
En definitiva, un producto de calidad donde la digitalización y modernización del proceso de elaboración se mantiene en constante renovación y un objetivo permanente en reducir el impacto ambiental.
Durante 2022 Mensajero ha conseguido una reducción del 20 por ciento de uso energético a través de sistemas fotovoltaicos para autoconsumo. El objetivo es llegar al 50 o 60 por ciento a pesar de que la empresa centra el periodo de producción en campañas específicas estacionalmente.
Además, Mensajero ha iniciado el proceso para conseguir la certificación ISO 14.000 que exige a la empresa la puesta en marcha de un Plan de Manejo Ambiental que incluya objetivos y metas ambientales, políticas y procedimientos para lograr esas metas, responsabilidades definidas, actividades de capacitación del personal, documentación y un sistema para controlar cualquier cambio y avance realizado.
Una empresa con más de sesenta años de historia y con un prestigio consolidado en los mercado internacionales en torno a la producción de alcachofa, tomate, albaricoque, melocotón, pera y manzana.
Empresa líder en la comercialización de alcachofa envasada al alto vacío, sin líquidos de cobertura y un envase innovador.
La apuesta por esta nueva línea de productos envasados al vacío es prueba de los retos en los que se encuentra sumergida la empresa. Innovación unida a la mayor calidad de producto y garantizando un menor impacto medioambiental.
La calidad es su máximo objetivo y mantienen la garantía de un producto de altas propiedades desde su primera producción de albaricoque en los años 60. Ha mostrado su capacidad de sustituir el proceso manual por el mecanizado y digital reduciendo costes y el proceso de elaboración.
Mensajero es sinónimo de competitividad y de unión. entre los agentes del sector, una unión que permite el desarrollo de propuestas innovadoras que repercuten en la mayor calidad del producto y un crecimiento continuo de las empresas conserveras ya que, pese a los altibajos que puedan presentar los mercados, la conserva sigue siendo un producto consolidado y ajeno a las modas alimentarias.
