Ya en la calle el nº 1041

La posible vuelta de ABBA

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Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.

PEDRO ANTONIO HURTADO GARCÍA

El próximo mes de Marzo sale a la venta, en Inglaterra, un nuevo libro sobre Abba, ese cuarteto musical, de los años ’70 que continúa vendiendo dABBA en la actualidadiscos como el primer día y que, pese a su separación, hace ya muchos años (1982), sigue siendo una auténtica industria, muy rentable, en el mercado discográfico, además de venderse todo lo que lleva su marca conformada por el nombre del grupo que tanta popularidad les otorgó. Ese libro, titulado “Abba: The Official Photobook”, contiene 600 imágenes del cuarteto sueco, siendo cien de ellas totalmente inéditas. Y es que no podemos olvidarnos de sus extravagantes y, al mismo tiempo, estrafalarias indumentarias y calzados que utilizaban los componentes de este cuarteto del que, para no sobrepasar la página que tenemos asignada, necesitaremos referirnos a ellos, en ocasiones, de forma muy resumida y pasando de puntillas por muchas de sus formas de ser, vivir, cantar y divulgar sus canciones, porque, de no hacerlo así, podríamos completar una edición de “El Noroeste” íntegra con las muchas anécdotas, canciones, actuaciones y récords que nos dejó la banda.
Y se baraja, ahora, una posibilidad que entendemos bastante improbable, pero que, como consecuencia de algunas entrevistas a sus componentes, de forma aislada e individual, parecen coincidir en el regreso del cuarteto en este 2014 actual, utilizando como “excusa” el cuarenta aniversario del rotundo éxito de su canción denominada “Waterloo”, una de sus partituras más vendidas y con la que ganaron incontestablemente, en Brighton, el legendario Eurofestival cuando Eurovisión era Eurovisión. Y, según comentan ellos mismos, existen muy buenas vibraciones para “hacer algo con ocasión de ese aniversario”. Su última actuación conjunta tuvo lugar en 1982 y quedó inmortalizada para siempre, porque se trató de una aparición televisiva.

Su nombre artístico obedece a un acrónimo
La denominación de “ABBA”, como muchos lectores sabrán, obedece a un acrónimo formado por las primeras letras del nombre de cada miembro. Así A(Anni-Frid “Frida” Lyngstad), B(Benny Andersson), B(Björn Ulvaeus) y A(Agnetha Fältskog). Formaron el grupo en Estocolmo, en 1972, pero su fama internacional no llegó hasta 1974 cuando Eurovisión y “Waterloo” se confabularon como un explosivo cóctel para alcanzar un triunfo que nunca decayó y que, hoy, todavía, después de casi 32 años desaparecidos, continúan resultando familiares, atractivos, respetados y escuchados por varias generaciones. Sus pegadizas melodías, sus canciones llenapistas, sus letras comerciales y sencillas y su particular sonido, basado en las armonías femeninas perfectamente conjuntadas con las del otro sexo, dejaron cabida inexorable a ese efecto creado por el reputado productor llamado Phil Spector y que dio a conocer su creación como “wall of sound”.

Dos matrimonios conformaban el cuarteto
A pocos se les escapa que ellos eran dos matrimonios. Así Björn y Agnetha contrajeron tal estado unos meses antes de la formación del cuarteto. Benny y Frida lo hicieron en 1978. Y los cuatro supieron manejar, en principio, sus importantes obligaciones artísticas, el respeto a su público y la administración de tanto éxito, mientras, simultáneamente, se ocupaban de dar contenido y razón de ser a sus nuevas familias. Con un impacto comercial irrepetible, se convirtieron en los artistas más vendedores de la década de los ’70, lo que supuso un auténtico filón para su compañía discográfica que no era otra, en aquella época, que la muy respetada y prestigiosa “Universal Music Group”. También logaron ser el primer grupo del continente europeo en saborear el triunfo en países de lengua inglesa fuera de Europa, principalmente en Nueva Zelanda, Canadá, Sudáfrica, Australia y Estados Unidos. Pero fue la separación de ambos matrimonios lo que generó importantes transformaciones que dejaron huella indisimulable en su música, ya que ello dio lugar a escribir letras extraordinariamente más profundas que generaron un estilo musical diferente que, con el sello ABBA, siguieron produciendo ventas de forma abultadísima.

Unos 400 millones de discos vendidos
Y quedó patente ese atractivo comercial cuando, en la década de los ’90, fueron lanzados diversos álbumes recopilatorios del cuarteto que dieron como resultado su vuelta ininterrumpida a las listas de popularidad más importantes de los cinco continentes. Ser uno de los grupos más respetados tiene como marca y patente el haber logrado cerca de 400 millones de discos vendidos en todo el mundo, además de que su música haya sido interpretada, versionada, bailada, emitida y valorada por artistas, medios de comunicación y “consumidores”, de todo tipo y condición social, del mundo entero. Y ya resumimos para dar a conocer muchas más cosas en el menor espacio posible. Desde sus 18 años, Benny Andersson perteneció a la banda The Hep Stars, un grupo sueco identificado con el pop-rock de la época que se prodigaban con versiones de grandes éxitos internacionales cantadas en su idioma, el sueco. Era el teclista y compositor de temas originales que daban identidad propia a su banda, cosechando grandes éxitos como “Wedding”, “Sunny girl”, “No response”, “Speleman” o “Consolation”. Por su lado, Björn Ulvaeus era miembro de The Hootenanny Singers, grupo, también sueco, alineado en la música folclórica y skiffle, quienes grababan para la discográfica Polar Music, empresa en la que el propio Björn lo intentó como productor, mientras escribía partituras para el grupo, no perdiendo la oportunidad de entablar una intensa amistad con Stig Anderson, propietario de la referida discográfica. Con frecuencia, ambas bandas, coincidían en sus actuaciones y, como consecuencia de ello, los dos compositores forjaron lo que sería una fructífera relación profesional que, en principio, generó canciones conjuntas para sus respectivas bandas y, luego, sirvieron de germen para ABBA.

FRIDA comenzó a cantar con 13 años
Por su parte, Agnetha Fältskog grabó su primer disco de estudio con nada más que 17 años, lo que le valió para cosechar de los críticos criterios en forma de piropos como “talentosa compositora”. Y llegó a publicar cuatro álbumes antes de formar ABBA. Desde los 13 años cantó Anni-Frid “Frida” Lyngstad con diversas bandas de jazz, incluso formó su propio grupo denominado “Anni-Frid Four”. En el verano de 1967 ganó un importante reconocimiento con la canción “En ledig dag”, consistente en un contrato con la discográfica “EMI” y, por añadidura, una actuación en directo en un popular programa de televisión. En 1971 contactó con Benny para producir su álbum inicial, de donde salió su primer sencillo como número uno. Y, en esa canción, titulada “Min egen Stad”, los cuatro futuros miembros de ABBA eran los coristas en la interpretación. Se fueron conociendo y, en Abril de 1970, cuando todos estaban de vacaciones en Chipre, se produjo su presentación improvisada ante los Cascos Azules de la ONU con lo que comenzó como un canto por diversión en la misma playa. Y, de ahí, partió el sonido ABBA. Y ya, el 1 de Noviembre de 1970, en Gotemburgo, los cuatro integrantes se atrevieron a presentar un espectáculo de cabaret denominado “Festfolk”, un claro juego de palabras que, en sueco, significa “fiesta de la gente” o “parejas comprometidas”, con no pocas críticas adversas que les hicieron pasar una primera época inquietante, incierta y plagada de dificultades. Digamos, también, que la primera “B” en el logotipo de ABBA fue colocada al revés, intencionadamente, en una campaña promocional de la banda, en 1976. Posteriormente, se tradujo en su logotipo oficial y en una marca registrada. En el verano de 1973, ABBA comenzó una larga gira por los folkparks (así se denominó el primer tour realizado por el grupo cuando todavía se llamaban Björn & Benny, Agnetha & Frida, en su Folkpark Tour 73) que abarcó desde Julio hasta Septiembre, presentándose en más de sesenta conciertos al aire libre. Después de la exitosa gira comenzaron a trabajar en un segundo álbum.

Canciones irrepetibles e inolvidables
Y como el espacio no permite mucho más, hagamos, a modo de grato recordatorio, una relación de esas emblemáticas canciones que, quienes somos amantes de la música del sueco grupo, siempre seleccionamos las primeras, esas que, además, han alimentado una película musical internacional, protagonizada por la siempre insuperable e inconfundible Meryl Streep, así como un musical de teatro que ha tenido versiones en muchos idiomas. La versión española la protagoniza Anna Maria Agustí i Flores, conocida artísticamente como Nina, la que también nos representó en Eurovisión, con “Nacida para amar” (sexto puesto clasificatorio en el año 1989), una voz inconfundible apadrinada por el desaparecido e inolvidable músico catalán Xavier Cugat. En ese musical, te levantan de la butaca canciones como la propia “Waterloo”, “Honey, honey”, “Mamma mía”, la canción que da título a la película y musical citados, “Fernando”, que facturó más de diez millones de copias para convertirse en el sencillo más vendido del grupo, “Chiquitita”, “Dancing Queen” y una larga lista de conocidas, divertidas y muy populares canciones que siempre resultan bonitas para escuchar y agradables para bailar. Y, con esos títulos y los muchos más que conforman su interminable discografía completa, se han editado recopilatorios, nuevos lanzamientos y demás promociones que hacen, como decíamos al principio, que la “Industria ABBA” no haya tenido nunca dificultades en su “cuenta de resultados”.

¿Su vuelta?
¿Volverán?. Eso se dice, pero mucho nos tememos que no, aunque, seguro, nos serviría para aprovechar la ocasión y poder, así, verles en directo, un sueño no culminado para muchos. Pero, cuando se celebró el 50 aniversario del “Festival de Eurovisión”, su canción “Waterloo” fue elegida como la mejor de la historia del Eurofestival y no fueron capaces, entonces, por esas notables diferencias personales, de acudir a recoger tan brillante reconocimiento, lo que hace pensar que, por lo menos en ese momento, eran más fuertes las circunstancias que les alejaban que las que les unían. Pero, en cualquier caso, el tiempo nos lo irá desvelando todo.
De momento, en Murcia, tenemos razones sobradas para sentirnos más identificados que nunca con el referido “Festival de Eurovisión”, porque el pasado sábado, en una gala televisiva de “La 1”, de TVE, fue elegida como representante española una murciana: Ruth Lorenzo Pascual, artísticamente conocida como Ruth Lorenzo, una joven y guapa intérprete y compositora que, a sus esplendorosos 31 años, ya ha triunfado en tierras británicas donde es respetada, querida y considerada como artista. Esta chica murciana, que domina el inglés a la perfección, nos representará, el día 10 de Mayo próximo, en el LIX Festival de la Canción de Eurovisión que se celebrará en Copenhague-Dinamarca, con la canción titulada “Dancing in the rain” (“Bailando bajo la lluvia”). De Ruth Lorenzo y del propio “Festival de Eurovisión” tratará nuestra página de la próxima semana. Por eso, no nos extendemos más. No se la pierdan, por favor. Buenos días.

Pedro Antonio Hurtado García
es Director de Zona de CAJAMURCIA-BMN
en el Noroeste murciano

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