ENRIQUE FUENTES, CONCEJAL SOCIALISTA EN EL AYUNTAMIENTO DE CARAVACA
Como casi siempre, en publicaciones recientes el alcalde de Caravaca José Francisco García (JFG) presume de éxitos que no le corresponden, y de gestiones que dejan mucho que desear.
Que nadie se deje engañar cuando JFG presume de gestión en la mejora de las cuentas públicas. Si la recaudación municipal no ha subido, y la cesión de la gestión de nuestra recaudación a la Agencia Regional no está dando los resultados deseados, la mejora de las cuentas públicas solo es atribuible a la flexibilidad en la regla de gasto que ahora sí permite utilizar el superávit; también a los fondos de ordenación que autoriza a los ayuntamientos en situación de riesgo financiero aplazar el pago de la deuda; y al aumento en la participación de los tributos del Estado. Tres instrumentos presupuestarios impulsados por el gobierno de Pedro Sánchez que indudablemente proporcionan al ayuntamiento de Caravaca mayor liquidez.
Presume JFG de las obras de restauración de las cubiertas y de la fachada barroca de la basílica (690.003 €) omitiendo que estas fueron gracias a la gestión directa del alcalde socialista Pepe Moreno, que recibió la notificación del ministerio de Fomento del gobierno socialista de Pedro Sánchez el 08 de abril de 2019.
Presume JFG de apoyo a la ganadería extensiva, pero no lo vimos defender a los ganaderos de ovino segureño cuando reclamaban las ayudas de racionalización del pastoreo que les debía el gobierno de López Miras; si dichas ayudas hubieran sido del gobierno de Pedro Sánchez, JFG se habría fotografiado exigiendo el pago. Finalmente, aunque con seis años de retraso, los ganaderos han cobrado gracias a la presión que hemos hecho los socialistas. También presume JFG de una escuela de pastores, repleta de carencias que no cumple con los estándares mínimos de calidad que sí tienen otras escuelas de pastores de España.
Presume JFG de mejoras en carreteras y en caminos rurales, pero su plan de travesías es una muestra más del servilismo a López Miras: consiste en que el ayuntamiento de Caravaca asume la propiedad de las carreteras de la comunidad autónoma que pasan por terreno urbano, lo que ocasionará una sangría económica por quedar el consistorio obligado a su reparación. Por otro lado, la gestión en caminos rurales durante el mandato de JFG no puede ser más pobre: con el Plan de Desarrollo Rural no se ha comprometido la reparación de ningún camino municipal porque el gobierno de López Miras, que quitó 5 millones al presupuesto de caminos rurales para dedicarlos a otras cosas, no ha sacado ninguna convocatoria durante esta legislatura. En contraste, durante la gestión de Pepe Moreno se comprometió la reparación de siete caminos rurales de los que aún queda por hacer el del Arrabal de Benablón, pero, curiosamente, como depende del gobierno de López Miras y no del de Pedro Sánchez, no vemos a JFG exigir su ejecución. Habrá que ver cómo se lo explica a los ciudadanos de Benablón cuando les pida el voto.
Finalmente, una vez más quiero dejar claro que el proyecto estratégico de unos 4´5 millones de euros para poner las aguas del Taibilla a disposición de la mayoría de las pedanías de Caravaca y del polígono industrial de Cavila, que mejorará considerablemente la calidad del agua de abastecimiento y disminuirá la sobreexplotación del acuífero, se consiguió gracias a la insistente gestión del equipo de Pepe Moreno, a pesar de que el PP cerrara las puertas a los caravaqueños (Dirección General del Agua en el gobierno de López Miras y CHS y MCT en el gobierno de Rajoy). Fue la llegada de Pedro Sánchez a la presidencia del gobierno de España el revulsivo para que la Mancomunidad de los Canales del Taibilla se comprometiera a financiar el proyecto en su totalidad, cuya ejecución está prevista para los próximos meses.
Mal lo debe llevar quien intenta suplir sus carencias con los éxitos de los demás.
