JAIME PARRA
La Escuela de Piragüismo de Calasparra tiene en Juan Martínez y en Clara González a sus dos abanderados. Los dos han conseguido codearse con la elite de este deporte en el que habitualmente destacan deportistas del norte de España.
Terminada la temporada y, aún con las dudas de que en primavera pueda retomarse la competición, los dos continúan entrenando.
Juan, que comenzo a practicar piragüismo a los 9 años, en los Pirineos, donde se encuentra en seguimiento por parte de la Selección Nacional Absoluta; Clara, en Calasparra, que este año fue su último como junior y ya compite en sub23, aspira a participar este verano en los campeonatos de Europa y del Mundo.
Los dos se alegran de que su antiguo presidente en la Escuela de Piragüismo de Calasparra, César Reales, ocupe este mismo cargo en la Federación Murciana. “Es genial. Estamos todos muy contentos con tener a alguien de confianza. Puede llevar a cabo muchas de las ideas que tiene en mente”, se complace Clara, mientras que para Juan es un puesto: “más que merecido y ganado por él, al final estoy seguro que, de las personas que conozco, es la que más se ha involucrado sin esperar recibir nada a cambio. Lo ha dado todo por el piragüismo. Le encanta luchar porque todo el mundo pueda tener su hueco en este mundo”.
También los dos coinciden en que Adrián Ruiz será un digno sustituto y en el mérito -Clara habla de “meritazo”- que tiene que un club del sur de España como el suyo compita con los del norte. “Ahora tiene más niños que nunca. Las escuelas de verano han estado a rebosar, todavía son pequeños y están aprendiendo pero pronto estarán compitiendo y a ver hasta dónde llegan”, señala Clara.
Juan califica también de éxito el gran número de niños que se han iniciado en este deporte de la mano de las escuelas de verano y subraya sobre todo cómo han hecho una piña y el gran compañerismo que hay entre los que disfrutan de un deporte que te hace estar en contacto permanente con la naturaleza, que te quita los miedos, donde aprendes valores.
Ambos se entrenan duro este invierno para continuar dándole éxitos a su club y convertirse en habituales de la Selección Española, y quien sabe si en un un futuro disputar los Juegos Olímpicos.