ANA ANDÚJAR/http://daregirl.wordpress.com
“¿Es que eres un gallina, Mc Fly?” Así arengaban al protagonista de “Regreso al futuro” cuando la cosa se ponía fea. Como Marty, al miedo al ene
migo sólo lo superaba el miedo al fracaso. También Marty definió a muchos jóvenes de los 80, que montados en sus deloreans esperaban vientos mejores en épocas distintas. Pero esos chicos y chicas ya se han cansado de esperar a que el rayo les devolviera al tiempo que les había tocado vivir. Nadie-nos-llama-gallinas.
Afortunadamente, al ver las noticias y entre tanta basura, todavía se pueden encontrar grandes historias: de gente joven (o no tanto) que ya no quieren depender de un sistema que les ha fallado. Toca apelar al individuo, al corazón, mente, intelecto y puro ocio de cada individuo, que sin querer es parte de pequeñas comunidades que se creen o saben especiales. ¿Quién se atreve a meterse en tal jardín, sabiendo que ser autónomo es la gesta más kamikaze, y que vender un producto costará sangre, sudor y lágrimas? Pirados y provocadores, aspirantes al triunfo con delirios de grandeza, verdadera carne de talento y sin ella… pero desde luego gallinas no.
Hablamos de proyectos como los de “Ad minimun”, una microeditorial independiente dedicada a la publicación de obras en formato pequeño de la mano de Bea Miralles y Verónica Cámara, ambas apenas rondando la treintena, y que localizadas en Murcia, quieren devolver a la poesía a las primeras filas de las librerías. Más tradicionales pero con el mismo espíritu apocalíptico, “La Fea Burguesía Ediciones” se estrena el jueves 19 para dar voz y reconocimiento a grandes autores patrios como Miguel Espinosa. La revista “Stolen magazine”, hará lo propio la semana siguiente, cuando al fin se desvelen los detalles de esta innovadora publicación que lleva sólo un mes repartiendo contenidos exclusivos con artistas de la región en sus sites online y que a través de una particular campaña de crowfounding podrá tener su versión en papel. “La Postiza” abre sus puertas este fin de semana, residencia de artistas, centro cultural y parada de los monstruos en Monteagudo ideado por Belén Conesa.
¿Acaso estamos aquí para hacer dinero? Deberíamos. Ana y Cristina montaron su propia tienda de arte, manualidades y accesorios en el centro de Murcia, “Julieta sin Romeo”, y ya es uno de los locales más queridos de la ciudad. “El Miradoor Audio Estudio” en Alhama o “Mia Estudio de Grabación” en la Fuensanta o “La Sala de Máquinas” en Lorca son estudios de grabación comandados por respectivos locos que han superpuesto un sueño a una hipoteca y ya han cincelado para la posteridad a otras tantas bandas locales. La firma de accesorios de la aguileña Cristina Navarro, “La Gorgone” ya vende a nivel internacional, y los fotógrafos de Juno Producciones (Murcia) o los caterings de Casa Taller Birdie (Los Belones), capitaneados por jóvenes emprendedores pueden presumir de ganarse un (sencillo pero orgulloso) sueldo con sus proyectos, y son una pequeña muestra del infinito talento de una generación que se ve perdida pero no vencida. Porque también pueden organizarse para luchar, como el colectivo de diseñadores y creadores de Yecla, “El Creadero”, que convocan diferentes eventos para divulgar la palabra del que sabe que cuando las instituciones llaman a la puerta, la inspiración salta por la ventana, y las riendas las debe llevar uno mismo.
No sólo en la bohemia y el arte está el espíritu McFly. La empresa murciana y de representación caravaqueña, VRelia, presentó hace apenas unos días un ambicioso proyecto de realidad virtual en Silicon Valley. Al “VReye Pro” y “VReye Go” ya los definen como unos de los dispositivos de este campo con mejor calidad de imagen, y el olor a pelotazo recorre las calles del pueblo. Nuestro propio delorean aquí, tan cerca. Quién dijo miedo.
