JAIME PARRA
Fotografía: Cristina Peral
Miguel Ángel Pomares, presidente de los Guías Turísticos de la Región de Murcia (Asguimur) participó recientemente en el II Congreso Nacional de su gremio, celebrado en Murcia pero con una parada en Caravaca de la Cruz, donde un centenar de guías conocieron tanto la ciudad como los preparativos del inminente Año Santo 2017.
Intrusismo y estacionalidad son los dos principales problemas de este gremio, Miguel Ángel Pomares quien también vivió como guía el Año Santo en 2010 opina que los recursos museísticos de 2017 apenas han variado respecto a aquel, y que la apuesta de los gobiernos por la creación de museos o centros expositivos sin más no atraerá un turismo de calidad, o no atraerá un “turista”, sino más bien un “excursionista.
– ¿Qué atractivos ofrecen Caravaca de la Cruz y la comarca del Noroeste para el turista?
– Tanto Caravaca como la comarca ofrecen sobre todo historia y patrimonio monumental y natural. Estos recursos, bien articulados, promovidos, coordinados y vertebrados entre sí, dotados con los suficientes equipamientos e infraestructuras deberían ser motivo suficiente para que el turismo fuera un sector mucho más importante de lo que es en la actualidad.
-¿Qué piden o quieren saber los turistas cuando llegan a Caravaca?
La Cruz de Caravaca sigue siendo el gran foco de atracción a la ciudad, no sólo como motivo religioso, sino también histórico, cultural y, por qué no, mistérico; A partir de ese punto de partida, surgen en Caravaca otros intereses transversales y comunes a todo destino turístico de ámbito principalmente cultural como por ejemplo el interés por la gastronomía, arqueología, fiestas, etc…
-En cuanto a recursos turísticos ¿Qué ha cambiado respecto al año 2010?
Los recursos son los mismos de siempre, otra cosa es que esos recursos hayan sido convenientemente convertidos en producto turístico susceptibles de ser generadores de riqueza y trabajo. con respecto al último año jubilar se ha incorporado la casa-museo de los caballos del vino, que no es gran novedad teniendo en cuenta que es una “segregación” del obsoleto “museo de la fiesta”. Creo que habría que apostar por otro modelo de producto turístico, no solamente centrado en la creación de museos o centros expositivos sin más; habría que pensar en algo más novedoso y atractivo, que por sí mismo fuera capaz de atraer turistas de calidad a nuestra ciudad. Ahí, el antiguo convento de carmelitas descalzas aún no ha dicho su última palabra.
-¿Cómo podrían ayudar tanto las instituciones como la ciudadanía en general a que Caravaca atrajera más turistas?
No creo que se trate de traer más turistas, sino mejores turistas, que hagan realmente honor al término que los define. Realmente, a día de hoy tenemos mayoritariamente “excursionistas” de unas horas y habría que intentar revertir un poco la situación de “colapso” que puntualmente podemos sufrir y que genera efectos negativos tanto en el visitante como en la población local. A la administración hay que pedirle facilidades para emprender en el sector y dotaciones, equipamientos e infraestructuras que hagan más fácil y accesible la ciudad a nuestros turistas. En cuanto a la ciudadanía, nada en especial, con que el caravaqueño se muestre como realmente es, hospitalario, amable y enamorado de su ciudad debería ser suficiente. Si además, sumamos el debido respeto con el medio ambiente, limpieza de calles y fachadas, tendríamos un destino 10, otorgando un plus de calidad y autenticidad al destino que, sin duda, lo haría mucho más atractivo.
-En febrero se expondrá el proyecto “Destino Turístico Caravaca 4.0” ¿Qué son los destinos turísticos inteligentes?
Los destinos inteligentes son propios del tiempo en que vivimos y del turista del siglo XXI, donde las TIC están presentes en todos sitios desplegándose y desarrollándose de forma innovadora sobre una infraestructura de vanguardia con la finalidad de averiguar cuales son los gustos y preferencias reales del turista y, así, poder adaptarse a los mismos desde el destino. Otra cosa es que esta versión de destino inteligente sea la que más se ajuste a las necesidades del turista tipo de Caravaca, normalmente de edad avanzada y poco familiarizado con las nuevas tecnologías. No obstante, todo lo que sea renovación y nuevas tecnologías aplicadas al turismo son iniciativas muy bienvenidas en el sector.
-¿Cómo debe ser un guía turístico para realizar bien su trabajo?
Sobre todo formado en las materias objeto de su discurso, a ser posible, en varios idiomas, pero no basta con ello. A esto hay que sumar unas cualidades humanas y psicológicas especiales, capacidad de liderazgo, entrega, vocación de servicio, paciencia, adaptación, resolución de imprevistos, etc…, que hacen que el guía de turismo, en contacto directo con el turista, sea el embajador y una de las caras visibles del destino ante sus visitantes.
-¿Cuales son los principales problemas con los que se encuentra el gremio en la Región de Murcia?
Intrusismo y estacionalidad, que derivan en precariedad. El intrusismo en una profesión como la nuestra es brutal, a pesar de la regulación legal que establece y define claramente qué es un guía de turismo y quien está facultado para el desempeño de esa profesión. Con la crisis económica el intrusismo se ha agudizado. Por otro lado, la acusada estacionalidad, algo intrínseco al turismo y que a día de hoy en la Región de Murcia es muy acusado. A épocas de trabajo se suceden largas temporadas de inactividad, lo que hace a muchos compañeros abandonar la profesión en busca de la estabilidad que aquí no encuentran. Lo expuesto anteriormente desencadena en precariedad, laboral y económica, en un sector, el turismo, en el que es muy complicado tener una dedicación plena.
