Alicia García Marín/Concejal y viceportavoz del PSOE
La concesión a nuestra ciudad del privilegio de ser una de las cinco ciudades del mundo titulares del Año Jubilar in Perpetuum abrió una ilusión y unas expectativas que, pasados los años, se han visto truncadas dejando una sensación de haber perdido, una vez más, una ocasión única.
Desde el 2011 la Comunidad Autónoma viene gestando la liquidación de la sociedad Cararava Jubilar –ya entonces deficitaria y con graves problemas económicos- liquidación que se hace efectiva en diciembre de 2013, pasando en ese momento a ser puramente municipal. En este medio año el Ayuntamiento no ha llevado a cabo ninguna actuación para coger las riendas de esta sociedad. Aunque no es de extrañar la dejadez de nuestro equipo de gobierno en este, como en tantos otros asuntos. El consejo de administración no fue convocado y no se presentaron cuentas de la sociedad en cuatro años. Con la consiguiente desinformación a los ciudadanos de lo que estaba ocurriendo con una sociedad que se creó para gestionar la importante misión de ser una de las cinco ciudades del mundo con el privilegio del Año Jubilar in Perpetuum.
Habrá que ver en un futuro dónde y en qué se ha dilapidado la cantidad ingente de dinero público que se ha mal gestionado. Pero esta es otra cuestión que, a lo peor, tendrá que ser investigada por la justicia.
Y ahora, en un nuevo alarde de brillantez, pretenden que seamos los caravaqueños los que financiemos tamaña empresa. Como si el pueblo no estuviera lo suficientemente asfixiado en deudas que, la mala gestión de nuestros gobernantes locales, ha provocado.
Ahora toca mirar al futuro. Desde el Partido Socialista estamos en total desacuerdo con la decisión del equipo de gobierno de que sean los presupuestos del Ayuntamiento los que soporten esta tarea. Esperemos que los demás grupos de la oposición se unan a nuestras propuestas para intentar hacer entrar en razón a un gobierno cansado y caduco que hace oídos sordos a los intereses de los ciudadanos.
La proyección, tanto del año Jubilar, referente del turismo religioso, como de Caravaca, atractivo destino turístico arqueológico, natural, gastronómico y cultural, trasciende a nuestra localidad, irradia a la comarca del Noroeste, a la Región y al ámbito nacional –de las cinco ciudades Santas, dos son españolas-.
Proponemos una Plan Integral de Turismo con el que seamos capaces de gestionar el patrimonio cultural de Caravaca, socializándolo y haciéndolo parte esencial no sólo del aspecto turístico, sino también de la educación y ocio de nuestros jóvenes.
El Plan integral de turismo tendría como objetivo la proyección de aspectos culturales, naturales, arqueológicos, etnográficos, gastronómicos y, por supuesto del aspecto religioso con el año Jubilar in Perpetuum como bandera. La forma de llevarlo a cabo sería a través de un plan general de turismo de implicación comarcal y regional, para conseguir que se creen empresas de ocio y tiempo libre, ampliando así la oferta turística local, para generar empleo en el sector turístico, y para que nuestras pequeñas y medianas empresas del sector del comercio y de la hostelería recojan los frutos que una buena gestión turística deberían haber fructificado mucho tiempo atrás.
