Gabriel Navarro, Fernando Jiménez, Patricio Hernández, Juan Pedro Sánchez López, Angel Alcántara, Jose Ignacio Gras, Miguel López Bachero, Pilar Berral, Josep Torrent.
Pacto por la Transparencia de la Región de Murcia.
Hace ya casi seis años que un grupo muy heterogéneo de ciudadanos de la Región, preocupados por el creciente alejamiento entre los ciudadanos y las instituciones políticas, promovimos un Pacto por la Transparencia y el Buen Gobierno. Propusimos un conjunto de medidas con las que recuperar la confianza de las gentes en sus representantes políticos. Aunque la tarea es urgente y queda muchísimo trabajo aún por hacer para lograr ese objetivo, es cierto que se dieron algunos pasos en el buen sentido como la aprobación de la Ley regional de Transparencia y, con ella, la creación del Consejo de Transparencia como órgano de control del cumplimiento de la Ley. La Asamblea regional puso al frente del Consejo a Don José Molina Molina, una persona especialmente idónea para desempeñar la tarea que se le encomendaba. Y no lo decimos porque fuera uno de los principales promotores de aquel Pacto, sino porque es una persona que aúna las características ideales para desempeñar una responsabilidad como esa: gran conocimiento de la materia, intachable integridad moral, sólida independencia de criterio, gran convencimiento de la bondad de los fines que persigue una institución como esa, y un entusiasmo difícil de encontrar en personas de su larga trayectoria y valía.
Gabriel Navarro, Fernando Jiménez, Patricio Hernández, Juan Pedro Sánchez López, Angel Alcántara, Jose Ignacio Gras, Miguel López Bachero, Pilar Berral, Josep Torrent.
Pacto por la Transparencia de la Región de Murcia.
Hace ya casi seis años que un grupo muy heterogéneo de ciudadanos de la Región, preocupados por el creciente alejamiento entre los ciudadanos y las instituciones políticas, promovimos un Pacto por la Transparencia y el Buen Gobierno. Propusimos un conjunto de medidas con las que recuperar la confianza de las gentes en sus representantes políticos. Aunque la tarea es urgente y queda muchísimo trabajo aún por hacer para lograr ese objetivo, es cierto que se dieron algunos pasos en el buen sentido como la aprobación de la Ley regional de Transparencia y, con ella, la creación del Consejo de Transparencia como órgano de control del cumplimiento de la Ley. La Asamblea regional puso al frente del Consejo a Don José Molina Molina, una persona especialmente idónea para desempeñar la tarea que se le encomendaba. Y no lo decimos porque fuera uno de los principales promotores de aquel Pacto, sino porque es una persona que aúna las características ideales para desempeñar una responsabilidad como esa: gran conocimiento de la materia, intachable integridad moral, sólida independencia de criterio, gran convencimiento de la bondad de los fines que persigue una institución como esa, y un entusiasmo difícil de encontrar en personas de su larga trayectoria y valía.
Sin embargo, tras seis meses desde la puesta en marcha de esta institución, creemos que es el momento de lanzar una llamada de atención sobre la preocupante deriva que está tomando el desarrollo de la transparencia y el acceso a la información pública en nuestra Región. El Gobierno regional de Pedro Antonio Sánchez está demostrando un compromiso más que débil con el avance de la transparencia, y una prueba de ello son la falta de dotación de medios económicos y humanos al Consejo de la Transparencia, la reiterada invasión de sus competencias por miembros del gobierno regional y el ostracismo institucional al que intenta someter a su Presidente. En definitiva, la falta de respeto por las decisiones de la Asamblea regional y el atentado a la dignidad de la institución que debe velar por que la Transparencia sea una realidad.
Tenemos una Ley y un Consejo presidido por un firme defensor y creyente del derecho fundamental de los ciudadanos a saber y exigir a nuestros gobernantes que nos rindan cuentas, elegido por el órgano depositario de la soberanía de los murcianos, y es responsabilidad de todos hacer lo que esté en nuestra mano para mantener ese órgano como lo que debe ser: un órgano independiente del poder político con verdadera capacidad de control.
Por ello, desde el Pacto por la Transparencia no podemos dejar de denunciar públicamente esta vergonzosa situación y de manifestar nuestro apoyo incondicional al Consejo, a su Presidente Don Jose Molina Molina y a todos sus miembros, para coadyuvarles en su no fácil tarea de conseguir que el mandato de la Ley de Transparencia sea una realidad y no un engaño a los ciudadanos, como parece que pretende el Gobierno Regional.
