La actriz, locutora y profesora de la Escuela de Arte Dramático de Murcia, Verónica Bermúdez, será la encargada de presentar las galas de la 61 edición del Festival Internacional del Cante de las Minas. La unionense repite tras haber presentado el certamen el pasado año, una experiencia que recuerda con emoción: “Me siento muy querida y muy afortunada por la acogida que tuve; me sentí respetada, amada y valorada y recibí el calor del público de una forma muy especial”, afirma, porque para ella, presentar este Festival al que lleva acudiendo desde muy pequeña era “cumplir un sueño”.
Tras recordar su paso por las galas del Festival en su pasada edición en Maquinista de Levante, mira con ilusión el regreso al Antiguo Mercado Público: “Es nuestra Catedral del Cante, un lugar donde yo he visto a tantos de los más grandes del flamenco, desde pequeña como público y en mis años de azafata”. Allí, un año más, volverá a tener protagonismo el vestuario, ya que la actriz ha contado en esta ocasión con cuatro diseñadores murcianos para mostrar “el arte, el talento y la creatividad que hay en el diseño de moda murciano”: Ramil y Pujalte, Zoraida Cases, Juan Martínez y Pilar Llamas.
“Espero que a los asistentes, al pueblo de La Unión y a los propios artistas, les lleguen al corazón las presentaciones que estoy preparando. Voy a volver a poner todo mi corazón y mi amor en esta edición”, añade.
Ana Belén García presentará la Agenda Cultural
“Volver a La unión es como volver a casa”, afirma la periodista Ana Belén García, quien presentará los eventos de la Agenda Cultural en esta edición del Festival. Descubrió el Festival al iniciar su carrera periodística, cuando trabajaba en Televisión Murciana. “Quién me iba a decir a mí que dos décadas después estaría tan estrechamente vinculada al mayor festival que la historia de la cultura haya podido dar”, afirma con ilusión.
Ya han pasado cinco años desde la primera vez que Ana Belén García presentó la Agenda Cultural para el Festival unionense, del que se enamoró, en sus propias palabras, por “el arraigo y el fervor con el que se vive la tradición minera y todo lo que envuelve a este festival reconocido a nivel internacional”.
