Pascual García
Sorprende este volumen de relatos, firmados por Francisco Martínez, y adscritos a esa nueva modalidad del cuento hiperbreve, del microrrelato o, simplemente, de la ficción convertida en una suerte de dardo certero, eficaz y, en muchos casos, inquietante. Son treinta textos de cuya lectura saldremos agradecidos, perplejos y, en bastantes ocasiones, admirados por el dominio natural con que el autor va llevándonos por los meandros de la narración, escondiendo algunos datos, escabulléndose como un mago de la palabra y mostrando en el último párrafo el resultado brillante de una historia bien contada, original y directa.
No se demora el autor en sacar brillo a epítetos innecesarios o imágenes retóricas baldías. Francisco Martínez va a lo suyo desde la primera palabra, citando desde muy cerca al lector para, justo cuando a va a producirse el encuentro, realizar una sabia finta y zafarse con presteza y soltura en el último momento, como si pretendiera al viejo modo taurino burlarnos y burlarse, en el mejor sentido de la palabra, de todo lo solemne y establecido.
El ingenio y la eficacia son los instrumentos literarios que presiden estos relatos ínfimos, que lo son sólo por su escaso volumen, pero en absoluto por su evidente importancia literaria. El autor usa el ingenio como una aptitud imprescindible para inventar nuevos modos de contar, para engañarnos a todos y conducirnos hasta una salida insólita e imprevisible, con la maestría de quien ya conoce el terreno narrativo y no es la primera vez que se interna por los páramos complejos de la palabra literaria, aunque éste sea su primer libro publicado.
La muerte y el amor (los eternos aliados) protagonizan casi de incógnito en ocasiones buena parte de estas piezas narrativas, de las que los lectores no saldrán en absoluto cansados, porque el volumen es corto, pero sobre todo porque constituye un excelente ejemplo de literatura de calidad y, sin embargo, tan cercana y amena que nos da la impresión de que Francisco Martínez lo ha pasado tan bien en su redacción como van a pasarlo cuantos se atrevan a adquirir este libro y a adentrarse en sus historias, narradas con un estilo limpio, transparente y satisfactorio.
Nadie puede situarse al margen del interés indudable que despiertan cada uno de estos relatos y yo les aseguro que nadie se defraudará por su atenta lectura; de manera que no me queda más que aconsejarles la compra del libro y, sobre todo, la lectura minuciosa de todos los cuentos.
EDITORIAL: PASIONPORLOSLIBROS