JAIME PARRA
La que fuera alumna de la Escuela de Música ‘Villa de Bullas’, Paqui Sánchez Gea, ha conseguido el Tercer Puesto en el XIII Concurso Nacional de Trompeta “Valeriano Machí Esparza”.
No es el primero, y seguro que tampoco el último, premio que recibe. Anteriormente ha recibido premios como la mención de honor en el concurso Villa de Molina en la modalidad superior. Anteriormente en categoría de grado profesional primer premio en este mismo concurso. Y segundo premio en el concurso Entre Cuerdas y Metales de Cartagena.
¿Cómo fueron tus comienzos en el mundo de la música?
Mis comienzos en la música fueron a los 4 años de edad, en la Escuela Municipal de Música de Bullas. Comencé haciendo cursos de iniciación para más tarde, con 7 años, iniciarme con la trompeta.
¿Por que trompeta y no otro instrumento?
La verdad es que nunca sé muy bien por qué elegí la trompeta. Nos dieron a probar varios instrumentos allí en la escuela y la verdad es que los de viento no me sonaba ninguno. Casualmente cuando me puse la trompeta en la boca apareció un pequeño sonido y la Paqui de ese momento se dijo: “vamos con este que parece que suena…”.
Más tarde te matriculaste en el Conservatorio en Caravaca.
La verdad es que ahora mismo pienso en el sacrificio que tienen que hacer todos los padres de los alumnos que vamos al Conservatorio fuera de Bullas y me quito el sombrero. Sin ellos sería imposible.
Además la mayoría no son músicos, así que creo que eso se debe valorar de manera doble, ya que lo hacen todo un poco “a ciegas” solo por la ilusión de su hijo o hija. Mi familia ha sido siempre, y es a día de hoy, el apoyo fundamental para poder dedicarme a esto. Sin ellos no hace falta ni decir que no estaría donde estoy.
Eres músico de Banda, ¿cómo es tocar en una?
Sí, llevo en la Banda de Bullas desde los 12 años más o menos y a día de hoy sigo yendo cada vez que puedo para tocar.
Tener una Banda Municipal como la de Bullas es algo increíble para un músico de viento. Cada vez que vuelvo es como ir a casa. Allí todos aprendemos muchísimo para poder saltar luego al mundo profesional quien desee hacerlo.
Lo bueno de tener una banda de estas características es que no necesariamente tienes que dedicarte al mundo profesional de la música, allí se va a disfrutar tocando cada uno con su nivel y el ambiente es muy sano. Yo siempre digo que la música hay muchas formas de disfrutarla y todas son validas si realmente se siente así.
¿A qué te dedicas en la actualidad?
Actualmente estoy viviendo en Madrid. Doy clases a niños en un colegio algunas tardes y lo compagino con conciertos con diferentes agrupaciones.
Tras acabar los estudios Superiores de Música en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, mi objetivo principal es continuar formándome todo lo posible con mi instrumento.
Además estoy realizando Estudios Orquestales en la Academia Fundación Barenboim Said, en Sevilla.
Ayer toqué por primera vez con la Banda Sinfónica Municipal de Madrid en el Teatro Monumental.
¿Cómo te sentiste tras tu premio?
La verdad es que recibir un premio siempre es algo gratificante, es el fruto de mucho trabajo. Pero realmente influyen muchos factores más allá del propio estudio personal: los nervios, la situación, el momento en el que tocas… No es lo mismo tu día a día que exponerte en una situación así que te saca de la zona de confort.
Por eso es súper importante tener estas oportunidades de tocar en público. En este caso, todos los participantes podrían haber conseguido un premio y seguro que se lo merecían igual o más que los premiados.
En el mundo de la música se establece una relación profunda entre maestro y profesor, ¿cuáles han sido los que más te han marcado?
Mis profesores han sido Víctor Rodrigo en Bullas, Rafa Gonzalez en el conservatorio de Caravaca y Oscar Grande en el superior en Madrid. Con el que más relación tengo de estos tres es con Victor, ya que es el director de la banda de Bullas y hemos hecho una gran amistad.
A día de hoy, desde el año 2018 doy clases en Madrid con Antonio Cambres, posiblemente mi mayor referente. Me ha ayudado muchísimo y es un referente tanto profesional como personalmente. Es el Solista de la Banda Municipal de Madrid.
