Francisco Peñalver, director del Museo Arqueológico de Cehegín | Nicolás Caballero, ilustre pintor ceheginero, nos muestra en las salas temporales del museo varias de sus obras de diferentes temáticas con un denominador común, la gente. Con pinceladas sueltas y contundentes que definen con pocos trazos las profundidad del espacio en el que se desarrolla.
Su obra nunca defrauda tras ser admirada, siempre queda ese sutil sabor a a haber empleado el tiempo en elevarnos el espíritu.
En los cuarenta y tantos años que lleva el Museo abierto al público han pasado multitud de exposiciones de muy diversa temática, y una gran parte de ellas de autores de aquí, lo que pone de manifiesto la sensibilidad artística que poseemos sus habitantes.
Pintores, escultores, orfebres, artesanos berreros, carpinteros, albañiles, restauradores y un largo etc. Por no hablar de músicos, escritores y poetas de prestigio, que los ha habido y los hay ahora.
Esto no es fruto de una colonización extraterrestre, sino que está por cualquier sitio y a nuestro alrededor. Los montes nos rodean, las calles del casco antiguo y sobre todo su gente, vemos continuamente cosas y formas de ser que algo tendrán que ver.
Estando en el final de la programación de primavera-verano del Museo Arqueológico, con las Jornadas de Patrimonio y las Noches del Museo en la que hemos tenido una amplia variedad de actos, como han sido conferencias de muy diversa temática, pero con el trasfondo común del patrimonio en su más amplia concepción y seguido de conciertos de música clásica y exposiciones de pintura y fotografía, para que el Museo sea un centro cultural de atracción de visitantes continuo y siguiendo las directrices del Comité Interaccional de Muesos ICOM.
