CARM
La Consejera de Cultura y portavoz del Ejecutivo, Noelia Arroyo, visitó hoy, junto al delegado del Gobierno en la Región, Antonio Sánchez-Solís, el Museo Salzillo de Murcia para conocer las tareas de embalaje y transporte de las obras que se exhibirán en Caravaca de la Cruz en la exposición ‘Salzillo y Caravaca de la Cruz. El escultor del mayor crédito de estos Reynos’.
La muestra reunirá medio centenar de piezas y se celebrará del 20 de febrero al 28 de mayo en la antigua iglesia de la Compañía de Jesús. Se enmarca en los actos programados con motivo del Año Jubilar 2017, “que ya se está convirtiendo en el principal acontecimiento cultural y turístico que va a vivir nuestra Región durante este año”, declaró Arroyo.
A la visita organizada hoy también han asistido el presidente de la Real y Muy Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Murcia, Antonio Gómez-Fayrén; la directora del Museo Salzillo, María Teresa Marín; y el comisario de la muestra, el catedrático Cristóbal Belda.
“Las obras que serán trasladadas hoy a Caravaca, con un dispositivo de seguridad especial que garantizará su total integridad, son dos de las esculturas más hermosas y emblemáticas realizadas por el maestro imaginero Francisco Salzillo, San Juan y La Verónica, que salen en procesión cada año en la mañana murciana de Viernes Santo, declarada Bien de Interés Cultural”, tal y como recordó la consejera y portavoz.
Salzillo, añadió, “es uno de los grandes nombres de nuestra historia y un ejemplo de la unión del arte con la fe y la religión”. Por ello, “la exposición de Caravaca de la Cruz será uno de los principales reclamos para quienes visiten la Región, aunque no el único, ya que desde el Gobierno hemos programado más de un centenar de actividades para engrandecer aún más este Año Santo que contribuirá a que la Región sea más conocida y valorada”.
Las obras
La talla de San Juan fue un encargo de la Real y Muy Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, fue realizada por Francisco Salzillo en 1755 y al año siguiente salió por primera vez en procesión. Con gesto de andar y con el manto recogido por su mano derecha, señala mientras con la otra el camino por donde llevan a crucificar a Cristo.
Salzillo se enfrentó con esta obra a la problemática de representar una figura aislada, que había que contemplar en redondo y que debía dar la sensación de movimiento. Para Belda supone el modelo ideal para la escultura barroca española del siglo XVIII por su perfecta unidad de forma y de color y por la calculada ejecución de sus distintos planos. La túnica y el manto son una muestra excepcional en la técnica del estofado y sus pliegues remarcan el perfecto estudio anatómico.
La Verónica fue tallada en el mismo año, en 1755, y Salzillo la vistió como una cortesana de su época, alternando los azules verdosos, los rosas y ocres, y con todas las prendas ribeteadas con oro. Diversos planos dan volumen a la talla, destacando su espalda, con un turbante que estiliza la figura y le da más sensación de movimiento.
Su rostro es hermoso y con una mirada de tristeza que se dirige hacia sus manos, que sostienen el paño con la Santa Faz. El más antiguo que se conserva es el de Domingo Valdivieso, del siglo XIX, aunque son varios los artistas murcianos que han regalado paños a la Verónica y en el Museo se exponen también los de Manuel Muñoz Barberán y Pedro Cano.
La exposición
La exposición ‘Salzillo y Caravaca de la Cruz’ estará compuesta por más de 50 piezas (pinturas, esculturas, telas, documentos y otros objetos). Arroyo explicó que ocho de estas obras “están siendo sometidas en estos momentos a un proceso de mejora en el Centro de Restauración de la Región, un centro pionero por sus técnicas y su equipamiento y cuyos técnicos poseen una amplia experiencia en la obra de Salzillo”.
La muestra, que cuenta con el patrocinio de Fundación Cajamurcia, forma parte del proyecto ‘Huellas’, que sigue poniendo en valor el patrimonio religioso de la Región de Murcia. Además de las piezas de Salzillo, estarán presentes obras de los escultores de su escuela de Caravaca, como Ginés López Pérez, José López, Marcos Laborda y Francisco Fernández Caro.
