Ya en la calle el nº 1040

Inolvidable Whitney Houston

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp

Añade aquí tu texto de cabecera

Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.

PEDRO ANTONIO HURTADO

Confieso que es un film que he visto en cada ocasión en la que he tenido oportunidad y reconozco, al mismo tiempo, que se trata de una película con pocos valores añadidos, por no decir ninguno, que salvan, exclusivamente, ella, con su gran capacidad interpretativa y, él, con su demostrado oficio como actor: Whitney Houston y Kevin Costner, el auténtico culpable de que muchos niños y adolescentes, en nuestro país, lleven por nombre el infumable “Kevin”. La película en cuestión, titulada “The Bodyguard” (“El Guardaespaldas”), no solamente da nombre a la cinta, sino, igualmente, al mejor disco, sin duda alguna, de la intérprete de color estadounidense. Después de haberla ofrecido todas las cadenas de televisión, habidas y por haber, la pasada semana volvimos a verla en la cercanía que otorga nuestra televisión autonómica, «7-RM”, que la puso en antena, quizás, por si alguien no había visto, todavía, tan atractiva trama romántico-mafioso-celoso-musical. Y… ¡¡¡volvimos a verla!!!. ¿Por qué no?. Ahora, tenemos tiempo para eso y para todo. Y ahí fue cuando decidimos compartir con nuestros habituales lectores la historia, discografía, insuperable voz y magistral repertorio de esta irrepetible intérprete del rhythm and blues, pop, soul, balada, góspel y el más auténtico jazz. Whitney Elizabeth Houston (09-08-1963, Newark-Nueva Jersey-Estados Unidos/11-02-2012, Los Ángeles-California-Estados Unidos), quien se nos marchó con 48 años de edad, fue conocida, artísticamente, como Whitney Houston. Y, por añadidura, también gozó de gloria como modelo, compositora, productora, actriz y empresaria. Una mujer para todo con brillo de rutilante estrella, también en todo, y que hubiera exhibido una carrera mucho más completa, dilatada y exitosa de no haber sido por las siempre inoportunas drogas.

PEDRO ANTONIO HURTADO

Confieso que es un film que he visto en cada ocasión en la que he tenido oportunidad y reconozco, al mismo tiempo, que se trata de una película con pocos valores añadidos, por no decir ninguno, que salvan, exclusivamente, ella, con su gran capacidad interpretativa y, él, con su demostrado oficio como actor: Whitney Houston y Kevin Costner, el auténtico culpable de que muchos niños y adolescentes, en nuestro país, lleven por nombre el infumable “Kevin”. La película en cuestión, titulada “The Bodyguard” (“El Guardaespaldas”), no solamente da nombre a la cinta, sino, igualmente, al mejor disco, sin duda alguna, de la intérprete de color estadounidense. Después de haberla ofrecido todas las cadenas de televisión, habidas y por haber, la pasada semana volvimos a verla en la cercanía que otorga nuestra televisión autonómica, «7-RM”, que la puso en antena, quizás, por si alguien no había visto, todavía, tan atractiva trama romántico-mafioso-celoso-musical. Y… ¡¡¡volvimos a verla!!!. ¿Por qué no?. Ahora, tenemos tiempo para eso y para todo. Y ahí fue cuando decidimos compartir con nuestros habituales lectores la historia, discografía, insuperable voz y magistral repertorio de esta irrepetible intérprete del rhythm and blues, pop, soul, balada, góspel y el más auténtico jazz. Whitney Elizabeth Houston (09-08-1963, Newark-Nueva Jersey-Estados Unidos/11-02-2012, Los Ángeles-California-Estados Unidos), quien se nos marchó con 48 años de edad, fue conocida, artísticamente, como Whitney Houston. Y, por añadidura, también gozó de gloria como modelo, compositora, productora, actriz y empresaria. Una mujer para todo con brillo de rutilante estrella, también en todo, y que hubiera exhibido una carrera mucho más completa, dilatada y exitosa de no haber sido por las siempre inoportunas drogas.

La cantante Whitney HoustonIncomparable discografía
Su discografía es amplia y muy valorada, pero, para nosotros, su mejor disco continúa siendo el que da título a la citada película, valorando muy satisfactoriamente todas sus composiciones, creadas por el incuestionable Alan Silvestri, aunque, quizás, por destacar alguna, cabe distinguir la prodigiosa balada titulada “I will always love you”, en la que la americana muestra los excelentes prodigios e inmejorables registros de su inigualable voz, un disco que solamente puede ser sustituído, al contener casi todas sus canciones y verse ampliado con otras grandes composiciones, por el titulado “Whitney: The greatest hits”, un recopilatorio envidiable que une calidad, éxitos, historia y memorables momentos de la intérprete y que, ahora mismo, se encuentra a la venta a un precio verdaderamente fantástico.

La artista más galardonada de todos los tiempos
Está considerada, mundialmente y hasta este momento, según “Guinness World Records”, como la artista más galardonada de todos los tiempos, al haber conseguido dos “Emmy”, seis “Grammy”, treinta premios “Billboard Music Awards” y nada más y nada menos que veintidós “American Music Awards”, como muestra o avance de los 415 premios totales de los que disfrutó en su carrera. Igualmente, está considerada como una de las intérpretes musicales más vendedoras, al haber colocado en el mercado el mayor número de discos individualmente conseguido por todos los artistas del universo musical: más de 170 millones de álbumes, sencillos y vídeos.
Con la música en las venas
Sus padres, John Russell Houston (13-09-1920/02-02-2003), fallecido a los 82 años, y su madre, Cissy Houston, que nació el 30 de Septiembre de 1933 y gozaba de reconocida talla musical y relevante respeto en ese campo, posibilitaron a su hija, Whitney Elizabeth, que pudiera integrarse, a la edad de once años, como vocalista en el coro góspel infantil de la iglesia “New Hope Baptist”, de Newark, en New Jersey, donde comenzó su prestigiosa formación musical y, sobre todo, vocal, aunque, también posteriormente, acompañaría a su madre en los conciertos, lo que le hizo llevar la música en las venas. Encasillada en la religión bautista, estudió, no obstante, en un instituto de secundaria de convicciones católicas. Y, como si de la famosa canción de Julio Iglesias se tratase, la titulada “De niña a mujer”, en 1978, sin haber cumplido todavía los 15 años, apareció en el álbum de su madre titulado “Think it over”, para, seguidamente, comenzar a protagonizarle los coros a otros artistas de reconocido prestigio, como lo eran Lou Rawls, Jermaine Jackson o Chaka Khan. Con solamente 16 años, ya le ofrecieron la oportunidad, que aceptó, de convertirse en la principal voz en el sencillo de la banda de Michael Zager, titulado “Life’s a party” y, muy pronto, concretamente a principios de la década de los ’80, inició su aparición en revistas, en calidad de modelo, ocupando hasta alguna de las portadas de las publicaciones de mayor prestigio mundial, pues, además de todo, era guapísima. Y su primera grabación, como cantante profesional, tuvo lugar en el año 1982, integrándose, para ello, en la formación denominada “Jazz-Funk Material”. La canción del estreno llevaba por título “Memories” y fue incluída en el álbum que el mencionado grupo tituló “One Down”.

No hay mal que, por bien, no venga
En realidad, necesitaríamos toda una edición de “El Noroeste” para poder relatar la vida, obra, milagros y adversidades de la intérprete, pero tenemos que resumir porque nuestro espacio está preasignado y no podemos alterarlo. No obstante, a modo telegráfico, diremos que, gracias a su fallecimiento (dice el viejo y sabio refrán que “no hay mal que, por bien, no venga”), no vio a su única hija sobre la mesa de autopsias, quien perdió la vida a consecuencia de una inmersión en agua e intoxicación por drogas, según reflejaba, en su momento, el informe forense realizado a la joven Bobbi Kristina Brown, revelado como consecuencia de su fatal desenlace personal, ocurrido el día 26 de Julio de 2015, cuando contaba con 22 años de edad y, justamente, seis meses después de ser hallada inconsciente, en el baño de su casa de Atlanta, en Georgia, donde vivía con su novio, Nick Gordon.

La Voz
Whitney Houston, por otro lado y desde sus comienzos, sintió la influencia de prestigiosos intérpretes de soul, como lo fuera su propia madre, Cissy Houston, o sus primas Dionne Warwick y Dee Dee Warwick, además de su mítica madrina, Aretha Franklin. Se le aplicó el sobrenombre de “The Voice” (“La Voz”), como resultado obvio de su calidad vocal. El primer álbum que le catapultó a la fama fue el de su debut, en 1985, bajo el título de “Whitney Houston”, un plástico del que se vendieron más de 30 millones de copias, lo que le llevó a convertirse en el disco de debut con más notables ventas, por parte de una intérprete femenina, en toda la historia de la música. Y, así, podríamos recurrir a más títulos, canciones y participaciones señeras de esta inolvidable artista que hay que escuchar, volver a escuchar y enamorarse de su música, de sus registros y de su facilidad para hacer, con su prodigiosa voz, sencillo lo complicado.

Una vida desordenada
Sus contratos millonarios nunca imaginados, su discografía plagada de éxitos y su fama mundial se vieron truncados por un fallecimiento joven y acelerado por culpa de las siempre lamentables drogas y como consecuencia de una vida desordenada que es lo único que empaña, ¡¡¡y de qué manera!!!, la vida de un mito musical que pasará a la historia como pocos: Whitney Houston que en gloria esté. Buenos días.

¡Suscríbete!

Recibe cada viernes las noticias más destacadas de la semana

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.