PEDRO ANTONIO HURTADO GARCÍA
DE CARA
Con la denominación “De cara”, inauguramos columna con el presente texto. Hoy, en el número de su estreno, solamente queremos comentarles a nuestros lectores qué espíritu es el que persigue la misma.
El título quiere dejar bien claro que no será una columna complaciente, sino una crítica, siempre respetuosa y equilibrada, sobre esos aspectos sociales que nos pesan y nunca denunciamos, pero que están ahí y nos gustaría resolver mediante soluciones concluyentes.
Puede que, en alguna ocasión, el tinte social se traslade a otros órdenes, pero serán temas que habitualmente descansen en el sentir de la ciudadanía. Y, ahí, viene al caso la denominación de la sección, en forma de columna individual, que no podemos superar en extensión por la distribución de este semanario.
Así, pues, trataremos siempre de ir “De cara”, con el máximo respeto, fortaleciendo la denominación de la columna e identificándonos con ella.
La prudencia que aconsejaba nuestra anterior profesión financiera, ya desvinculados de su disciplina, nos recomendaba abordar temas más intranscendentes o menos comprometidos, pero, en nuestra nueva situación, nada ni nadie podrá impedirnos redactar opiniones, que entendamos justas y contrastadas, con el rigor y la seriedad que siempre hemos pretendido utilizar en nuestra tarea.
Que la suerte nos acompañe y que el interés de nuestra columna resulte del agrado de los lectores en general. Sin duda, ese será nuestro denominar común habitual y nuestro empeño, se lo aseguramos. Buenos días.