PACO MARTÍNEZ
Cada lugar tiene unas particularidades geográficas y ambientales, que influyen directamente sobre los productos que se pueden cultivar de una manera natural, dependiendo de la época del año en la que nos encontremos. Disponer de un espacio en la escuela para que los alumnos puedan experimentar y conocer el ciclo natural de las plantas que proporcionan alimento, favorece su aprendizaje y amplía su formación, pero además, y en el colegio La Tercia de Benizar creemos que es más importante, fomenta una serie de valores que inspirarán el respeto por el medio ambiente, aumentan su sentido de la responsabilidad, favorece una alimentación sana y equilibrada, y además los alumnos interactúan con su entorno más próximo de manera que este tipo de proyectos conectan a la escuela con su entorno, e impulsan el trabajo en equipo.
Por todo ello, además de las indispensables verduras y hortalizas, en nuestro huerto escolar hemos comenzado a cultivar plantas autóctonas, como son el lentisco, durillo, boj, lavanda dentada o romero. Plantas que crecen de manera natural en esta parte del noroeste murciano y que suponen por ello, un cultivo natural, sostenible y respetuoso con el medio ambiente. En este proyecto se ha involucrado la empresa local Viveros Alhárabe, quienes han tenido la gentileza de proporcionarnos la materia prima necesaria para poner en marcha esta iniciativa.
En tiempos en los que el consumo de alimentos ultra procesados y el deterioro del medio ambiente causan estragos en nuestra salud y en nuestro planeta, nuestro colegio quiere concienciar a sus alumnos en la importancia del consumo de alimentos naturales y en el respeto al medio ambiente. Probablemente son pequeñas gotas de agua, pero estamos convencidos de que solo con la educación de los más pequeños, la Tierra tendrá una oportunidad de futuro y desde ese punto de vista los educadores jugamos un papel trascendental en la concienciación hacia un desarrollo sostenible.