Ya en la calle el nº 1040

Corazones que se tornan flamencos y se rinden ante la “Catedral del Cante”

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp

Añade aquí tu texto de cabecera

Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.

Pedro Antonio Hurtado García

“Fotos: Fundación Cante de las Minas”

Lo de La Unión, durante estos días y como cada año, es un no parar artístico en el que impera el tributo a la memoria minera local, al arte flamenco, a la afición de sus gentes y, esencialmente, se sigue cultivando el gran honor y enorme privilegio que ostenta la localidad minera, proclamándose, por méritos propios, “Catedral del Cante” a nivel mundial, lo que le otorga, igualmente, la oportunidad de celebrar el festival de flamenco más importante del planeta. Un certamen que, este año, se extiende desde el 29 de julio al 7 de agosto y en el que su pregonero ha sido el cantautor asturiano, de Mieres, Víctor Manuel San José Sánchez (07-07-1947), artísticamente conocido como Víctor Manuel.

Corazones que se tornan flamencos y se rinden ante la “Catedral del Cante”
Miguel Poveda

El certamen, declarado de interés turístico internacional y medalla de oro al mérito en las bellas artes, dedica sus contenidos, este año, como país homenajeado, a Lituania. Y se proclama como “Festival seguro para una afición responsable”, lema sustancial para la difícil época que vivimos, estableciendo unas estrictas medidas de acceso que apuestan por la seguridad colectiva.

Comenzaron las celebraciones con el legado de Asensio Sáez en la “Maquinista de Levante”, sede oficial del certamen en este especial 2021. Se trata del conjunto de obras que, seis jóvenes creadores de La Unión, colocaron, para su exhibición, en los laterales del patio de butacas del referido recinto. Son Julia Bermúdez, Rosario Gijón, Francisco Guerra, Ana Larios, Darío Martínez y José Martín ‘Teño’, coordinados por el artista Esteban Bernal Aguirre, comisario de la exposición.

Víctor Manuel, pregonero de lujo.- Y, como no tenemos espacio para detallar lo mucho y bueno que acontece, estos días, en La Unión, donde los corazones se tornan flamencos y se rinden ante la “Catedral del Cante”, refirámonos, con un poco de más profundidad, al pregón del asturiano Víctor Manuel, del que entresacamos detalles como los que les ofrecemos. Recordó su procedencia de una familia de mineros: su abuelo, su padre, sus hermanos, primos y tíos. “La mina y la tragedia, como forma de vida, siempre han estado presentes en esa cuenca del río Caudal, donde yo viví hasta los 16 años y donde vivió y sigue viviendo parte de mi familia”, aclaró.

“Hablamos de trabajos insalubres y, desde el punto de vista ambiental, poco deseables. Pero no podías elegir y, por lo tanto, morías por inanición o ponías tu salud en juego”. No dudó en cambiar el concepto de nostalgia en torno a la minería, tanto la asturiana como la unionense, por el de “melancolía”, “aunque es peor –añadió-, porque trajeron riqueza y desarrollo, sí, pero, cuando se fueron, no dejaron ni migajas de los años de abundancia”, sentenció. Sintió la conexión con el municipio desde el primer momento, debido a ese hermanamiento existente, entre su tierra y La Unión, en torno a la minería, los duros trabajos y el conocimiento de la tragedia de primera mano.

“Podemos reconocer en territorios lejanos y en explotaciones diversas, como en un espejo, otras vidas, azarosas como las nuestras. Y sentirnos solidarios por el mero hecho de descender a quinientos metros bajo tierra o extraer mineral a pleno sol, con frío o con lluvia”, explicó Víctor Manuel en un pregón colmado de reflexiones sentidas y vividas por los congregados, directamente o por sus familiares.

El pasado minero.- El cantautor recordó que ha cantado, copiosamente y a su manera, a la mina. Y recordó “El abuelo Víctor”, primera de las canciones que compuso con temática minera. Luego llegarían “Planta 14”, “Carta de un minero a Manuel Llaneza”, “María Coraje”, “Paxarinos”, “Por el camino de Mieres” o “Asturias”. “La mina, de frente o lateralmente, siempre ha entrado en mis canciones”, recordó.

Firma en el libro de honor.- Alabó la historia del “Festival del Cante de las Minas”, así como a las figuras unionenses que lo crearon, “como Asensio Sáez y los muchos nombres propios de la historia del flamenco que, en estos 60 años, han pisado sus tablas, representando una interminable lista con lo mejor del cante, del baile y del toque”. Y a falta de saber interpretar uno de los cantes de la tierra, como una minera, una taranta, una cartagenera o una levantina, el cantautor asturiano, con la humildad y sencillez que le caracterizan, puso broche de altura a su pregón deleitando a los presentes con una canción tradicional de la minería asturiana. Momentos antes de su pregón, el artista también firmó en el libro de honor del ayuntamiento de La Unión.

Una sirena que hizo vibrar a la población.- Un acontecimiento singular y emotivo fue cuando volvió a sonar la sirena de la “Maquinista de Levante”, después de más de 30 años, convirtiendo a La Unión en cultura y conmocionando a sus habitantes. La misa minera, en la iglesia de Nuestra Señora del Rosario; el encendido de la portada realizada por Esteban Bernal, en la Avenida del Flamenco; el homenaje al minero y viuda del minero, en la Plaza de Joaquín Costa; lugar en el que también se entregó el galardón “Rojo el Alpargatero” a la “Peña Flamenca de Los Palacios y Villafranca”; o el brillante cante, en la calle, de Manuel Cuevas, fueron otros de los acontecimientos del jueves inicial, sin olvidarnos de la “Gala de ganadores de 2019”, con Matías López “El Mati”, premio “Lámpara Minera” 2019; José Fermín Fernández, premio “Bordón Minero” 2019; Olga Llorente, premio “Desplante Femenino” 2019; Alejandro Solano, premio “Filón” 2019, lo que volvió a vestir de lujo la “Maquinista de Levante”, con acceso gratuíto.

Arte de toda naturaleza.- El viernes se celebró la entrega del galardón “Pencho Cross”, en la categoría de gastronomía, al “Festival de exaltación del Botillo de Bembibre” (León). Mismo galardón, en la categoría de periodismo, para Miguel Meroño, periodista que, durante 35 años, ha sido la voz de Radio Cartagena, de la Cadena Ser, además de presentador oficial del certamen en numerosas ediciones. Para el cante en la calle se contó con un reconocido saetero que, pronto, saltó a los grandes festivales flamencos y a publicar sus primeros discos. El magnífico malagueño Alfredo Tejada. El espectáculo “Alento”, de la compañía Antonio Najarro, fue otro acontecimiento de mucho nivel, repleto de ese juego combinado de baile, color, luces, música y moda.

Un alcalde fundador.- El sábado se entregó el galardón “Esteban Bernal Velasco” al propio Esteban Bernal Velasco, alcalde de La Unión y fundador del “Festival del Cante de las Minas”. Entrañable momento con el actual alcalde, Pedro López Milán, entregando el galardón al visionario alcalde distinguido, que vio en el certamen un prestigio sin parangón para el municipio minero. El mismo reconocimiento, en la categoría de difusión musical, lo recibió el ayuntamiento de Rojales. El cante en la calle contó con la actuación del cantaor de flamenco Juan Pinilla, quien, por añadidura, es escritor, investigador y columnista, además de nominado a los Premios Grammy Latinos 2014, en la categoría de mejor disco de flamenco, nominación compartida con Paco de Lucía y Enrique Morente. Una jornada que se cerró con el monumental concierto del pregonero, Víctor Manuel, quien, con el espectáculo “Volver para cantarlo”, con el que ya ha realizado otras giras anteriores, recupera su regreso a los escenarios acompañado por el gran pianista David San José, hijo del cantautor, así como el guitarrista Ovidio López, reverdeciendo lo que, para él, han sido sus mejores canciones. Una actuación, como ya nos tiene acostumbrados, verdaderamente memorable, además de recogida y entrañable.

Calasparra y su tauromaquia.- El domingo se cerró semana con la entrega del galardón “Rojo el Alpargatero” a la “Peña Flamenca de Álora”, en reconocimiento a su esfuerzo por la difusión del flamenco. El prestigioso galardón denominado “Castillete de Oro” fue recogido, igualmente, por la “Feria Taurina del Arroz”, de Calasparra, proclamando su afán por promocionar, constantemente, a las más importantes y jóvenes promesas del toreo del país. El cante en la calle brindó la actuación de Antonia Contreras, la cantaora malagueña que ha regresado a La Unión, recordando cuando, en 2018, compartió escenario, en la gloriosa “Catedral del Cante”, con Arcángel, aprovechando, también, para demostrar que sigue vigente su elegancia y templanza, sostenidas por la fuerte consistencia de la artista, que se ha hecho a sí misma.

Paco Montalvo nos acercó a Paco de Lucía y Camarón.- La jornada dominguera se cerró con la gala protagonizada por el cordobés Paco Montalvo (19-11-1992), con su espectáculo “Leyenda Tour”, en el que el artista confirma su condición de creador y máximo exponente mundial del violín flamenco. Su nuevo disco también luce el título de “Leyenda”, presentado junto al sonido de “La tarara”, un homenaje a Paco de Lucía, la memoria de Camarón y diversos clásicos populares del flamenco. Roza ya Montalvo el millón de seguidores, consolidándose como uno de los artistas flamencos más codiciados del universo del género, tal como dejó demostrado con su artístico trabajo sobre el escenario unionense.

Miguel Poveda: momento histórico.- El lunes, día 2, se practicó la entrega del “Galardón Pencho Cros”, en la categoría de artes plásticas, a la escultora María Dolores Fernández Arcas. Seguidamente, el “Castillete de Oro” a Juan Jiménez Alcaraz por su encomiable trabajo en la dirección del “Festival Internacional del Cante de las Minas”, a lo largo de varias ediciones. El cante en la calle nos brindó la soberbia actuación de Celia Romero, quien iniciara su carrera artística con siete años. Pero, a los quince, ya había transitado por las tablas de los escenarios más importantes de España. En 2011, logró la siempre deseada “Lámpara Minera”. Tenía, entonces, nada más que dieciséis años. De la gala del comienzo de semana, nada que no se esperara: el arte, el duende, la fuerza y sentimiento de Miguel Poveda (13-02-1973), con su espectáculo “En concierto”, con el que el artista vuelve a la raíz más profunda, exigente y tradicional del flamenco. Siempre brillante, este barcelonés, que se alzó con la “Lámpara Minera” en 1993. Colmado de emociones, sorprendió al respetable invitando a la cantaora unionense Encarnación Fernández. Juntos, rindieron homenaje a Pencho Cros en un momento que tornaron histórico.

Nuestra condición de semanario nos obliga a cerrar aquí, pero, en nuestra próxima entrega, les daremos noticias sobre el desarrollo del resto de actividades del certamen, programadas, en todo caso, con enorme ilusión y grandes expectativas. Buenos días.

 

¡Suscríbete!

Recibe cada viernes las noticias más destacadas de la semana

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.