JAIME PARRA
“El día tres de julio tomó posesión, como en todos los municipios, la nueva corporación. […] Como estaba previsto, por ocho votos a cinco, salió elegido alcalde el socialista Jesús Navarro, de cuarenta y un años, casado y padre de dos hijos. Militante de
l partido del que es secretario general en Calasparra y también militante del sindicato UGT”, recogía José Antonio Moya (El Noroeste, del 17 de julio al 7 de agosto de 1999) en este periódico la constitución de la nueva corporación de Calasparra, en la que, como concejal de Hacienda, Policía Local, Personal y Obras, ya se encontraba el que será sustituto de Jesús Navarro, Pepe Vélez, “el pleno fue totalmente protocolario, con una asistencia de unas cuatrocientas personas que llenaban el salón de actos y los pasillos del ayuntamiento. En su primer discurso el nuevo alcalde dijo que quería ser alcalde de todos los calasparreños, pero un poco más alcalde de quienes lo necesitaban: los jóvenes y sus inquietudes laborales, los mayores que en su vida lo habían dado todo, los marginados y las bolsas de pobreza…”.
En una entrevista el día de su toma de posesión adelantaba sus principales proyectos: el polígono industrial; la modernización de regadíos del Argos; la residencia de ancianos; la regeneración del río Argos, la apuesta por el turismo de interior y sobre todo las infraestructuras. Asimismo mencionaba “el tercer carril de la carretera 3.314 y la lucha por la estación de ferrocarril”.
Encadenó como Alcalde de Calasparra tres legislaturas con mayoría absoluta, hasta las de 2011, en las que el PSOE volvió a ser el partido más votado pero igualado a concejales con el PP y con IU-Verdes con el concejal decisivo. En su partido a nivel regional se valoró el hecho de que fuese de los pocos alcaldes que resistió la marea popular en Murcia y que, además, lograse un escaño para el PSRM-PSOE en la Asamblea Regional. Pero para la oposición de Calasparra el no estar acostumbrado a gobernar con acuerdos precipitó su marcha de la Alcaldía.
En estos últimos tiempos, ya estaba con una vista puesta en la política regional y comarcal y la otra en Calasparra. En clave regional, le disputó las Primarias de su partido a Begoña García Retegui en 2010, aunque perdió con el 34% de los votos, ocupa el cargo de secretario de Política Municipal y, desde su puesto de diputado, ha insistido en la necesidad de dotar a la comarca de mejores infraestructuras de comunicación: “vemos como la alta velocidad está generando sinergias y desarrollo económico donde pasa y no podemos quedar colgados. Hemos planteado AVE en la Venta del Olivo, que afectaría a tres comarcas. Pero el tren de cercanías es una posibilidad de futuro, y con una desviación de veinte o veintidós kilómetros vertebraría Caravaca, Cehegín y el puerto de Cartagena. Cruzaría en diagonal la región y afectaría a más de la mitad de municipios, incluida Murcia, el futuro aeropuerto y Cartagena”, señalaba a este semanario en 2011. Apostaba también por otro eje, la autovía del Norte, que uniría Fuente de la Higuera con Lorca (es decir, la comarca del Noroeste a la Comunidad Valenciana y Andalucía,): “abriría las puertas a muchas inversiones, pues estamos en un lugar estratégico y su construcción atraería a muchas industrias a nuestra zona”.
Desde su cargo como diputado regional por las comarcas del Noroeste y Río Mula, continuará insistiendo en la necesidad de la llegada de un tren de cercanías y por la Autovía del Norte que, como barruntaba, tampoco entrará en los presupuestos regionales de 2014. Deja también la Alcaldía, aunque no de cejar en el empeño, sin que haya solución al cierre de Conservas Fernández (uno de los momentos más difíciles de sus años como alcalde), como tampoco ha encontrado de momento solución a la modernización de regadíos (que ha enfrentado a unos comuneros con otros y con su Gobierno), otro de los asuntos a los que aludía en su toma de posesión. Sí ha visto concluida la residencia de ancianos y, sobre todo, la mejora de las infraestructuras de la localidad, el logro del que más orgulloso se muestra (“Calasparra que tiene poco más de 10.000 habitantes tiene infraestructuras mayores que muchos municipios con mucha más población”.
Volviendo a ese periódico el Noroeste (número 46), en una doble página “Candidatos a las Elecciones Municipales 13-J” vemos muchos rostros conocidos de la política actual: en Bullas Pedro Chico y José María Ortega, José Soria y Santos Abril en Cehegín, Domingo Aranda en Caravaca, Antonio García Rodríguez en Moratalla y Jesús Navarro en Caravaca. De ellos, dos ganaron las elecciones ese año y aún continúan: Domingo Aranda y Jesús Navarro, otros alcanzaron la alcaldía en años venideros como José Soria, Pedro Chico y Antonio García Rodríguez y hoy en día son alcaldes de sus municipios.
La marcha de Jesús Navarro de la política municipal quizá marque el principio del fin de una generación de políticos del Noroeste que comenzaron su andadura en ese ya lejano año de 1999.
