A veces hay que quedarse abajo y dar paso a otros para que suban al atril

Mª CRUZ LÓPEZ

Hace relativamente poco, y ante la noticia de que Alfonso Sánchez presentaría su dimisión como concejal así como la baja del PSOE, no hice sino defender su labor como concejal de la oposición, pues en estos 8 años ha realizado realmente un trabajo duro. Habrá a quien guste más o menos, pero trabajar había trabajado mucho.
Ahora bien, a veces, en política, no hablamos solamente de trabajo. Los dos últimos resultados electorales del PSOE en Caravaca de la Cruz, a la baja, han hecho replantearse a nivel interno que si bien trabajo no ha faltado puesto que es de alabar la labor de todos aquellos que en malos tiempos han tenido la valentía de poner su cara en una candidatura, su nombre en boca de todo un municipio, emplear su tiempo y parte de su vida privada en algo tan poco agradecido como es la labor de oposición, era necesario buscar otras alternativas.
Estos cambios se plasmaron en primer lugar en un cambio de secretario general, Antonio Donate, que ha sabido actuar con pies de plomo ante la perspectiva que se encontró y que no ha dicho una palabra más alta que otra para encauzar las aguas de nuevo.
Posteriormente, en la búsqueda de un candidato bien valorado, aclamado por la asamblea local que aprobó su nombramiento como candidato a alcalde. Y a partir de ahí, hay que respetar su trabajo y su enfoque.
Es normal que como candidato se rodee de gente de su completa confianza, de un equipo en el cual se pueda apoyar y de que trace con éste nuevas líneas y un nuevo proyecto de política local. Siempre desde la perspectiva socialista.
Conmigo se ha contado. Como ex concejal no sé, pero sí como persona con una formación profesional en Derecho y Tributos y una experiencia. He participado en la conferencia política como ponente y en mesas de debate para la elaboración del programa electoral.
Y es que a veces, hay que dejar trabajar a la nueva gente que llega, que lo hace con toda la buena fe del mundo. Hay que ser lo suficientemente humilde para hacerse a un lado y estar disponible de manera desinteresada por si necesitan consejo o apoyo.
A veces hay que saber quedarse abajo y dar paso a otros para que suban al atril.
Estoy absolutamente segura de que un equipo liderado por Pepe Moreno tendrá como guía básica en su línea de actuación la honestidad, la denuncia de irregularidades si es que fueren detectadas y la defensa a ultranza de la legalidad vigente.
Aquel que no lo crea así, lo mejor que puede hacer es en definitiva marcharse.